Keyla Andreína González, de 28 años, fue asesinada el 26 de julio mientras realizaba una transmisión en vivo desde su casa en Guayaquil, Ecuador.
La joven, presuntamente en tono de broma, pidió a Manuel Andrés Álava Lázaro acompañante de una amiga, que le disparara en la cabeza “para que no le doliera". Pese a gritar "no" al ver que el hombre sacaba un arma, recibió dos disparos letales. El agresor y su pareja huyeron tras el crimen.
El video fue difundido en redes sociales, el abuelo de la víctima, quien grababa la transmisión, señaló que el sujeto tenía un tatuaje de lágrima en el rostro.
Autoridades recuperaron el teléfono y casquillos en la escena y continúan con las investigaciones. El caso causó indignación y ha sido comparado con el asesinato de la influencer mexicana Valeria Márquez, durante una transmisión en vivo.
(APHA)