El Día Internacional del Trabajo se conmemoró con marchas multitudinarias en ciudades como Tokio, Los Ángeles, Manila, Venezuela, Alemania y París, donde trabajadores salieron a las calles para exigir mejores condiciones laborales y respeto a sus derechos.
Las movilizaciones no fueron solo una celebración, sino también un escenario de críticas contra el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump. En varios países, los manifestantes cuestionaron sus políticas sobre inmigración, derechos laborales y comercio.
En Estados Unidos, miles de personas protestaron en Chicago, Nueva York, Los Ángeles y Filadelfia, enfocándose en la protección sindical y la defensa de los trabajadores. En Manila, Filipinas, algunos manifestantes golpearon una figura representando a Trump, mientras que, en París, la policía respondió con gases lacrimógenos para dispersar las protestas.
En Japón, las demandas incluyeron aumentos salariales, igualdad de género, mejor atención médica y una reducción en el gasto militar. También exigieron un alto el fuego en Gaza y el fin de la invasión rusa en Ucrania.
Por otro lado, en Taiwán, el presidente Lai Ching-te advirtió que los nuevos aranceles estadounidenses podrían afectar el mercado laboral, sumando preocupaciones económicas a la jornada de protesta.
(CAGG)