Más de siete mil 400 docentes suspendieron clases bajo el movimiento de “brazos caídos”, convocado por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), impactando a cerca de 30 mil estudiantes de niveles preescolar, primaria y secundaria en Yucatán.
De acuerdo con las autoridades estatales de Educación, el paro provocó la paralización de mil 9 planteles de un total de tres mil 600 en la región.
A través de un comunicado oficial, el gobierno estatal reiteró su respeto al derecho de manifestación del magisterio, pero enfatizó la necesidad de garantizar la educación de los estudiantes mientras se atienden las demandas del gremio docente.
(CAGG)