Siria publicó el lunes los resultados preliminares de la votación indirecta para conformar un nuevo parlamento, en el primer proceso político tras el derrocamiento de Bashar al-Assad. El proceso, sin embargo, ha generado críticas por su limitada representatividad y transparencia.
Unos 6 mil delegados regionales eligieron a casi dos tercios de los 210 legisladores; el presidente Ahmed al-Sharaa designará el resto. Entre los nuevos legisladores hay seis mujeres y varios representantes de minorías religiosas y étnicas, incluidos cristianos, alauitas, ismaelitas, kurdos y turcomanos.
La falta de datos tras la guerra y suspendieron las votaciones en zonas fuera de su control, quedaron 21 escaños vacantes. Analistas señalan que los legisladores que designe Sharaa serán determinantes para definir la diversidad del nuevo Congreso.
(APHA)