Diez reclusos escaparon este viernes de la cárcel Orleans Parish Justice Center, en Nueva Orleans, Luisiana, tras abrir un agujero detrás de un inodoro. La evasión pasó desapercibida durante horas, ya que el único guardia asignado a la celda se encontraba fuera buscando comida en el momento del escape.
Entre los fugitivos hay sospechosos de asesinato, lo que ha intensificado la preocupación de las autoridades. Hasta ahora, tres han sido recapturados, mientras que siete continúan prófugos.
Imágenes de vigilancia, divulgadas en conferencia de prensa, muestran a los reclusos huyendo, algunos con ropa naranja y otros de blanco. Se les observa escalando una valla con mantas para evitar cortes por el alambre de púas y posteriormente corriendo por la interestatal hacia un vecindario. Además, dejaron garabateado en la pared un mensaje burlón: "Too Easy LOL", o en español: “demasiado fácil”, con una flecha señalando el hueco por donde escaparon.
Las deficiencias en la infraestructura penitenciaria, denunciadas previamente por las autoridades, facilitaron la fuga. La ausencia de los reclusos no fue detectada hasta más de siete horas después, durante un recuento matutino de rutina.
La sheriff de la parroquia de Orleans, Susan Hutson, señaló que las cerraduras defectuosas contribuyeron a la evasión y reiteró sus preocupaciones sobre la seguridad en el penal.
La policía estatal y agencias federales han desplegado operativos y helicópteros en distintos puntos de la ciudad para localizar a los prófugos.
(CAGG)