Por Gil Zantana

México.- El actor mexicano decidió terminar con las especulaciones sobre las acusaciones en su contra realizadas por la saxofonista María Elisa Ríos, quien lo señaló en redes sociales como un “depredador sexual”.

María Elena Ríos señaló a Tenoch Huerta como su agresor sin dar especificaciones, pero si asegurando que el colectivo “Poder Prieto” encubría las agresiones del actor, todo esto después que se compartiera una transmisión de un programa para el cuál fue llamada y no se le remuneró, dándolo a conocer desde su cuenta de twitter, siendo por esta vía donde señaló a Huerta por supuestamente abusar sexual y emocionalmente de ella.

Haciendo uso de sus redes el mexicano que protagonizó “Wakanda Forever”, extendió un comunicado extenso en dónde se defiende de tales acusaciones, marcándolas como falsas y sin fundamentos, además de revelar que mantuvo una relación con María Elena, pero que toda acción en su momento fue consensuada.

“Una acusación falsa y completamente sin fundamento sobre mí se ha extendido como fuego, y no puedo dejar que siga sin ser cuestionada. Hace aproximadamente un año, salí con Elena durante algunos meses. Fue totalmente consensuado en todo momento, como muchos pueden atestiguar. Y a lo largo de todo fue una relación amorosa, cálida y de apoyo mutuo. Sin embargo, después de que terminó, Elena comenzó a tergiversar nuestras interacciones tanto en privado como frente a grupos de amigos en común”, inicia dicho escrito”

“Como resultado, hace unos meses contraté a un equipo legal para iniciar las acciones correspondientes para proteger mi reputación y refutar estas acusaciones irresponsables y falsas que puedan generar daños y perjuicios. Aunque de ninguna manera soy perfecto, sé que estas acusaciones son simplemente falsas. Y aunque siempre trabajo para mejorar, debo rebatir las afirmaciones que son tanto equivocadas como ofensivas”, lo comparte Tenoch en redes para responder a la polémica, además de agradecer a todos aquellos amigos, familiares y seguidores que no dejaron de creer en su inocencia, a pesar de guardar silencio durante un par de días.

(PDR)