Diversas comunidades de los municipios de Jacala de Ledezma y Tlahuiltepa, en la Sierra Gorda de Hidalgo, quedaron incomunicadas tras las intensas lluvias y el desbordamiento del río Amajac.

De acuerdo con los reportes, los puentes artesanales y las tirolesas fueron arrasados por la fuerte corriente de lodo y agua, lo que impidió a los pobladores salir de la zona.

El agua invadió viviendas asentadas en los márgenes del cauce, por lo que vecinos fueron desalojados de emergencia en las localidades de Vado Hondo, Quetzalapa y Barrio Cadillal, en el municipio de Jacala.

Algunos habitantes fueron trasladados a un albergue instalado en la parroquia de Santa Mónica, mientras que otros fueron reubicados temporalmente en una telesecundaria.

Los deslaves en los cerros que bordean el afluente convirtieron el cauce en un pantano de arenas movedizas, lo que ha agravado la emergencia.

(APHA)