El gobierno de la Ciudad de México busca endurecer las sanciones contra quienes apartan y cobran por lugares de estacionamiento en la vía pública, conocidos como “franeleros” o “viene-viene”. En lugar de una multa de 300 pesos, la nueva propuesta contempla un arresto de hasta 36 horas en un centro de sanciones administrativas.

La iniciativa, que plantea una reforma a la Ley de Cultura Cívica, surge como respuesta a problemáticas recurrentes en zonas de alta afluencia como el Palacio de los Deportes, la Arena Ciudad de México y el Estadio Ciudad de los Deportes, donde ciudadanos han denunciado la ocupación irregular de espacios públicos.

El diputado local de Morena, Paulo Emilio García González, informó que la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, enviará la propuesta al Congreso de la Ciudad de México en los próximos días para su discusión y posible aprobación.

(CAGG)