El papa León XIV pidió al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, proteger los lugares de culto y a los civiles, tras el ataque a la iglesia de la Sagrada Familia en Gaza, que dejó tres muertos y varios heridos.
Netanyahu lamentó el hecho y lo atribuyó a munición perdida. Aseguró que Israel busca un alto el fuego de 60 días y la liberación de rehenes, pero culpó a Hamás por la falta de acuerdos.
El pontífice reiteró su llamado al cese de la guerra y expresó preocupación por la crisis humanitaria en Gaza, especialmente entre niños y ancianos.
Los patriarcas Pierbattista Pizzaballa y Teófilo III ingresaron a Gaza para visitar la iglesia y entregar 500 toneladas de ayuda. Italia pidió a Israel detener las operaciones militares y garantizar su seguridad.
(APHA)