Aparte de los mosquitos, en Estados Unidos habita otro insecto chupasangre de los cuales en caso de alguna picadura podría propagar enfermedades infecciosas.

Se trata de las moscas de arena, también conocidas como flebótomos o plumillas, que se caracterizan por ser diminutas, aproximadamente la cuarta parte del tamaño de un mosquito, color canela, vive en zonas cálidas, húmedas, rurales y boscosas.

Estos insectos son más activos por la noche y son muy pequeños, tanto, que se cuelan por las mosquiteras y provocan enfermedades como leishmaniasis, las cuales empiezan con un pequeño bulto que se convierte en llagas ulcerosas, también puede infectar órganos internos como el hígado, el bazo y la médula ósea.

(SGC)