Israel bombardeó este jueves la provincia siria de Sweida, horas después de que las tropas gubernamentales se retiraran tras intensos enfrentamientos con combatientes locales y la entrada en vigor de una tregua.
El ataque aéreo se dirigió a las afueras de la ciudad de Sweida, sin detalles sobre víctimas o daños. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos indicó que el blanco fue un grupo beduino involucrado en choques armados con la minoría drusa.
El presidente sirio Ahmed al Sharaa acusó a Israel de buscar la fragmentación del país y prometió proteger a los drusos, mientras un comandante beduino anunció una nueva ofensiva, alegando que la tregua solo aplica a las fuerzas gubernamentales.
La situación refleja la persistente inestabilidad en Siria y la influencia de actores regionales en el conflicto.
(CAGG)