Tyler Robinson, de 22 años, señalado como presunto asesino del activista conservador Charlie Kirk, dejó evidencia genética que lo vincularía con el crimen, informó el lunes el director del Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI), Kash Patel.
En entrevista para la cadena Fox, Patel afirmó que se encontraron rastros de ADN de Robinson en una toalla que envolvía la supuesta arma homicida y en un destornillador localizado en el techo de un edificio de la Universidad del Valle de Utah, desde donde aparentemente disparó contra Kirk.
Además, el FBI aseguró que halló mensajes de texto y una nota escrita a mano que sugerían la intención de asesinar al comentarista político. Aunque detalló que parte de esta información se recuperó después de que lo escrito fuera destruido.
Robinson permanece recluido en la cárcel del condado de Utah. Se espera que en el transcurso de la semana se le presenten cargos por homicidio agravado, disparo de arma de fuego con lesiones graves y obstrucción de la justicia en relación con el tiroteo ocurrido el 17 de septiembre.
La muerte de Kirk, de 31 años, generó repercusiones a nivel nacional, incluyendo el despido de empleados en diversas empresas por comentarios en redes sociales que supuestamente promovían violencia. Compañías como Delta Air Lines, American Airlines y United Airlines suspendieron a varios trabajadores, al igual que medios de comunicación, universidades y el servicio secreto estadounidense.
Mientras que, en Arizona, una persona de 19 años fue detenida por causar daños en las ofrendas situadas fuera de las oficinas de la organización fundada por Kirk, Turning Point USA.
(APHA)