Luego de una fuerte granizada que azotó los sembradíos de nopal y aguacate en el norte de Cuernavaca, Morelos, autoridades de Desarrollo Agropecuario iniciaron un análisis para evaluar los daños causados por el fenómeno meteorológico.
Para ello, una brigada técnica se desplazó a diversos municipios ubicados al norte de la capital, con el objetivo de realizar un diagnóstico puntual del impacto en los cultivos.
En el municipio de Tlalnepantla, una de las principales zonas productoras de nopal, se llevaron a cabo reuniones con agricultores para levantar un censo de afectaciones y coordinar posibles apoyos.
(CAGG)