El gobierno de Estados Unidos anunció el cierre temporal de su frontera sur durante quince días para la importación de ganado vivo, caballos y bisontes, como medida de prevención ante la amenaza del gusano barrenador.
La secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, explicó que la plaga afectó la industria ganadera durante tres décadas y enfatizó que no pueden permitir que vuelva a propagarse.
Sin embargo, su homólogo mexicano, Julio Berdegué Sancristán, expresó el desacuerdo del gobierno de México con la decisión, aunque confió en que ambas naciones encontrarán una solución negociada.
Pese a los esfuerzos mexicanos, que incluyen una campaña de erradicación y un cerco sanitario en el sureste del país tras la alerta zoosanitaria en la frontera con Guatemala, Washington optó por proceder con la suspensión.
La medida impacta directamente a los productores ganaderos y podría generar nuevas tensiones comerciales entre ambos países.
(APHA)