Casi el 80% de la población en Estados Unidos, alrededor de 265 millones de personas, están bajo alerta por el clima frío que se dejó sentir este martes y que provocó temperaturas peligrosas en al menos 43 estados.
Los niveles gélidos forman parte de un fenómeno meteorológico que se considera histórico por su intensidad y que trae nevadas y hielo en regiones que rara vez ven este tipo de clima.
Alrededor de 45 millones de estadounidenses que viven en el sur del país, en los estados del Golfo, desde Texas hasta Florida y hasta la costa de Carolina, sienten el azote de un frío extremo provocado por un aire proveniente del Ártico que sopla hacia el sur desde Canadá.
Esta tormenta, que pudiera ser considerada la más grande en décadas, trajo la primera advertencia de ventisca a las localidades de Beaumont, Texas, y Lake Charles y Lafayette, Luisiana, con una visibilidad observada de hasta un cuarto de milla y ráfagas de viento de hasta 35 millas por hora.
Además, el Servicio Meteorológico Nacional pronosticó entre 7.5 y 15 centímetros (de 3 a 7 pulgadas) de nieve y aguanieve para partes del sur de Misisipi y el sureste de Luisiana, incluida Nueva Orleans.
(APHA)