El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos confirmó la detención de 475 personas durante una redada en una planta de baterías para autos eléctricos en Georgia. El operativo se realizó en las instalaciones de Ajin Industrial Co., proveedora de Hyundai y Kia, ubicada en el condado de Troup.
Según el agente federal Steve Schrank, los detenidos trabajaban o permanecían en el país de manera ilegal. La mayoría ingresó con visas vencidas o sin documentación migratoria válida.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Sur reconoció que entre los capturados hay ciudadanos surcoreanos, aunque no precisó cuántos. La planta, de origen coreano, emplea a cientos de trabajadores en la cadena de producción de autos eléctricos.
Este operativo se convirtió en el más grande realizado en un solo lugar, en un solo día y con predominancia de una misma nacionalidad, según confirmó de dependencia gubernamental.
La redada forma parte de una ofensiva federal contra el empleo irregular en el sector manufacturero, especialmente en compañías vinculadas a la industria automotriz. El caso ha generado reacciones diplomáticas y preocupación entre empresas con operaciones binacionales.
Con este operativo, Washington refuerza su política migratoria en zonas industriales, mientras crece el debate sobre derechos laborales, seguridad fronteriza y relaciones internacionales.
(CAGG)