Siete personas murieron y al menos 20 permanecen desaparecidas tras el desbordamiento del río Piraí, provocado por fuertes lluvias en Santa Cruz, la región más poblada de Bolivia.

Las autoridades informaron que los equipos de emergencia utilizaron helicópteros para trasladar ayuda y rescatar a quienes quedaron aislados por el agua y el lodo, además de habilitar albergues para brindar asistencia humanitaria.

El gobernador Luis Fernando Camacho indicó que se realizó el desalojo de residentes del Centro de Orientación y Reintegración Social y que se trabaja en las comunidades más afectadas, donde además de las pérdidas humanas se registraron graves daños a la infraestructura y a las viviendas.

(CAGG)