El Dalai Lama asistió a una celebración por el inicio de los festejos de su cumpleaños número 90, según el calendario tibetano, en su lugar de exilio, Dharamshala en India.
Durante el evento, el líder espiritual dio a entender que, tras su muerte, se nombrará a un sucesor que continuará la lucha por la libertad de Tíbet. Ataviado con su tradicional túnica roja y amarilla, el Dalai Lama apareció ante miembros de su comunidad y seguidores de todo el mundo que acudieron al monasterio de McLeod Ganj.
A punto de cumplir 90 años el próximo 6 de julio, el guía del budismo considerado la decimocuarta reencarnación de este cargo que existe desde hace 600 años, vive desde 1959 en su residencia forzada en el país indio.
(APHA)