El Tribunal Internacional de Crímenes de Bangladesh condenó a muerte a la exprimera ministra Sheikh Hasina por crímenes de lesa humanidad durante la represión de las protestas de 2024, que provocaron su dimisión y huida a la India. El veredicto fue celebrado en la sala del tribunal.
El Gobierno interino de Muhammad Yunus pidió su entrega inmediata, amparado en el tratado de extradición bilateral con el país indio.
Hasina ya había recibido cadena perpetua por incitar violencia y permitir el uso de armas letales contra manifestantes. En el mismo caso, el exministro del Interior Asaduzzaman Khan Kamal también fue condenado a muerte, mientras que el exjefe policial Abdullah Al-Mamun obtuvo cinco años de prisión como testigo del Estado.
La sentencia capital se basa en el asesinato de seis manifestantes desarmados el 5 de agosto de 2024 en Daca. El tribunal evaluó cargos de asesinato, tortura y omisión de impedir abusos.
El fallo se emitió bajo fuerte seguridad. Hasina, líder histórica de la Liga Awami, abandonó el poder tras un levantamiento estudiantil que, según la ONU, dejó unas mil 500 muertes. Desde el exilio, denunció la condena como persecución política y acusó al Gobierno interino de manipular la justicia para eliminarla.
(APHA)