El Consejo Nacional de la Industria Tabacalera (CONAINTA) manifestó su preocupación ante la propuesta de reforma fiscal que busca incrementar los impuestos a los cigarros y productos de nicotina, lo que se traduciría en un aumento mínimo de 20 pesos por cajetilla para 2026.
La iniciativa, presentada el pasado 8 de septiembre en el Congreso de la Unión, tiene como objetivo reforzar la recaudación destinada al gasto en salud; sin embargo, ha enfrentado críticas por sus posibles efectos colaterales.
El organismo —integrado por las empresas Philip Morris México, British American Tobacco y Japan Tobacco International— sostuvo que este tipo de incrementos no cumplen con los objetivos planteados. Argumentó que, históricamente, las alzas impositivas han sido ineficaces para reducir el número de fumadores y tampoco han garantizado un aumento sostenido en la recaudación fiscal.
(CAGG)