Miles de personas recorrieron la Carrera Séptima de Bogotá, Colombia en una sólida demostración de unidad tras el atentado sufrido por el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien permanece en estado crítico.

Iniciada desde la Calle 72, la movilización avanzó hasta la Clínica Fundación Santa Fe, donde familiares, políticos y ciudadanos esperaban con clamor un parte médico.

Con banderas nacionales y el himno de fondo, la marcha incluyó un homenaje especial frente a la escultura de Diana Turbay, madre del político, asesinada en 1991. Más adelante, frente al Cantón Norte del Ejército, los manifestantes lanzaron un fuerte apoyo a las tropas al corear la consigna: “¡No están solos!”.

La excandidata presidencial Ingrid Betancourt estuvo presente y, visiblemente conmovida, advirtió sobre el peligro de la polarización.

En paralelo, hubo muestras de solidaridad en Cali, Medellín y Bucaramanga, donde ciudadanos se congregaron en plazas y parques para condenar la violencia y pedir unidad democrática. Las concentraciones reflejaron una petición nacional: cerrar filas en defensa de la vida y la democracia.

(CAGG)