Además de su heroico acto al salvar la vida de una niña en medio de las llamas tras la explosión de una pipa de gas en el puente La Concordia, en Iztapalapa, Ciudad de México, el agente de la Policía Bancaria e Industrial, Sergio Ángel Soriano Buendía, ya había demostrado su integridad en otra ocasión al devolver una importante cantidad de dinero a su dueño.
En diciembre de 2015, el oficial encontró una bolsa con más de 42 mil pesos en efectivo y varias pertenencias personales en el estacionamiento de una tienda departamental en Polanco. A pesar de que esa suma equivalía aproximadamente a un año de su salario, decidió entregarla, pues afirmó que los valores que le inculcó su madre no le permitían apropiarse de algo ajeno.
Este noble gesto fue reconocido por la corporación con un ascenso, un aumento salarial y mejores prestaciones.
Casi diez años después, Soriano Buendía volvió a demostrar su vocación de servicio y protección al acudir al lugar del siniestro. Sin importar el peligro, arriesgó su vida para auxiliar a la pequeña Sule y a su abuela, Alicia Matías, de 49 años.
El agente Soriano Buendía ha declarado que, aunque el calor y las llamas eran intensos, no dudó en ingresar para brindarles ayuda, confirmando que es un ejemplo destacado dentro de la policía.
(CAGG)