Bolivia vivió este domingo una jornada electoral marcada por alta participación ciudadana, divisiones en el oficialismo y denuncias de fraude y trata de personas por parte del expresidente Evo Morales.
Más de 7.9 millones de personas acudieron a las urnas para elegir presidente, vicepresidente y renovar el Congreso. El proceso transcurrió con normalidad en la mayoría de las 34 mil 26 mesas, aunque se reportaron incidentes menores en Ginebra y Cochabamba, bastión político de Morales.
El presidente saliente, Luis Arce Catacora, votó en La Paz y aseguró que su gestión dejará como legado “la recuperación de la democracia”. Arce renunció a la reelección en mayo, tras una administración marcada por crisis económica, escasez de combustible y fracturas internas en el Movimiento al Socialismo (MAS).
Las encuestas a boca de urna perfilan como favoritos al empresario opositor Samuel Doria Medina, de centroderecha, y al expresidente Jorge “Tuto” Quiroga, de derecha. Ambos podrían disputar un balotaje inédito si se confirman las tendencias. Para ganar en primera vuelta, se requiere más del 50 % de los votos o al menos 40 % con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo lugar.
El presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, fue apedreado y llamado “traidor” tras emitir su voto en Villa Tunari, bastión político de Evo Morales. El incidente refleja la tensión interna en el MAS, donde sectores afines al exmandatario rechazan la candidatura oficialista y acusan a Rodríguez de romper con la línea histórica del movimiento.
Por primera vez, el MAS compitió dividido. Su candidato, el exministro Eduardo del Castillo, fue respaldado por Arce, pero rechazado por Morales, quien promovió el voto nulo y denunció un supuesto plan de fraude para favorecer al oficialismo. Del Castillo fue abucheado en Santa Cruz y enfrenta bajos niveles de intención de voto.
Morales, inhabilitado por el Tribunal Constitucional, anuló su voto en Villa Tunari. Desde el Trópico de Cochabamba, anunció una reunión nacional para analizar los resultados.
La jornada también estuvo marcada por reclamos ciudadanos en casillas, falta de accesibilidad para personas con discapacidad y denuncias de pacientes y familiares que no pudieron ejercer su voto.
(FAGG)