Un avión modelo MD-11 perteneciente a la empresa UPS se estrelló este martes pocos minutos después de despegar del aeropuerto internacional Muhammad Ali, en Louisville, Kentucky.
La Administración Federal de Aviación confirmó que el siniestro ha dejado al menos tres fallecidos y once heridos, aunque las autoridades locales no descartan que el número de víctimas aumente.
El vuelo 2976 tenía como destino Honolulu y transportaba tres tripulantes, según informó la compañía, que aseguró estar colaborando con los equipos de emergencia. El impacto generó una intensa explosión y una columna de humo visible a varios kilómetros, lo que obligó a suspender temporalmente todas las operaciones aéreas en la terminal.
Este accidente ocurre en medio de una crisis nacional en el sector aeronáutico, agudizada por el cierre gubernamental que mantiene a decenas de agencias federales con recursos limitados.
El secretario de Transporte, Sean Duffy, advirtió horas antes del incidente sobre posibles cierres del espacio aéreo la próxima semana si la parálisis presupuestaria persiste.
(CAGG)