Apenas unas horas después de su inauguración, el centro de detención migratoria Alligator Alcatraz sufrió una inundación provocada por una tormenta veraniega en los Everglades de Florida. El complejo, promovido por el presidente Donald Trump como resistente a huracanes categoría 2, mostró filtraciones en techos y cables eléctricos expuestos.
Imágenes en redes sociales revelaron cómo el agua ingresó a los contenedores temporales, contradiciendo las garantías oficiales sobre su seguridad. El incidente ocurrió tras un recorrido del mandatario junto al gobernador Ron DeSantis y la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem.
La División de Manejo de Emergencias estatal aseguró que el problema fue “mínimo”, pero congresistas demócratas y grupos ambientalistas denunciaron condiciones precarias e insalubres.
(CAGG)