El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas decidió retirar la fuerza de paz de la ONU en el sur de Líbano a finales del próximo año, tras casi cinco décadas, cediendo a las demandas de Estados Unidos y su cercano aliado, Israel.

Esta decisión se tomó por unanimidad en la asamblea del jueves.

Estados Unidos, que inicialmente exigió la retirada en seis meses y luego buscó una extensión definitiva de un año, apoyó un mandato final de 16 meses para que la fuerza continúe sus actividades cerca de la frontera establecida entre Líbano e Israel por el organismo.

La resolución, impulsada por Francia, otorga un año a partir del 31 de diciembre de 2026 para que la fuerza retire a sus 10 mil 800 efectivos militares y civiles, así como todo el equipo de la ONU. Durante este período, las fuerzas de paz estarán autorizadas a realizar actividades limitadas.

Durante décadas, la fuerza multinacional de paz ha vigilado la situación de seguridad en el sur de Líbano, incluso durante la guerra entre Israel y el grupo paramilitar musulmán Hezbolá el año pasado.

No obstante, ha recibido críticas de ambos bandos y de funcionarios del gobierno del expresidente Donald Trump, quien redujo la financiación estadounidense para esta operación mientras reformulaba la política exterior del país.

La fuerza de paz, conocida como UNIFIL, fue creada para supervisar la retirada de las tropas israelíes del sur de Líbano tras la invasión de 1978, y su misión se amplió después de la guerra de un mes en 2006 entre Tel Aviv y Hezbolá.

(CAGG)