El gobierno de Guanajuato ofreció regresar a sus estados de origen a casi 700 jornaleros, presuntamente víctimas de explotación laboral en un rancho de Dolores Hidalgo. La mayoría se negó, alegando que en Guerrero, Veracruz, Chiapas y Oaxaca no tienen medios para vivir.
La Fiscalía estatal rescató a 642 trabajadores; 458 son adultos, 184 niños y se tiene información de 30 adolescentes que se fueron cuando llegaron las autoridades. El caso es investigado como trata de personas. Aunque no hay detenidos por este delito, sí fue arrestado un hombre por posesión de drogas.
El rancho quedó bajo custodia mientras avanza la investigación. Autoridades detectaron hacinamiento y violaciones laborales. El delito de explotación laboral puede alcanzar hasta 12 años de prisión si las víctimas son indígenas o afromexicanas.
(FAGG)