El presidente ruso, Vladimir Putin reconoció que el gasto militar ha generado serios problemas económicos en su país. Durante una rueda de prensa en Minsk, admitió que Rusia destina el 6,3 % de su Producto Interno Bruto (PIB) a defensa, una cifra que calificó como “bastante alta” y que, según él, ha contribuido al aumento de la inflación y al debilitamiento del crecimiento económico.

Putin planteó la posibilidad de reducir este gasto en los próximos tres años, aunque aclaró que aún no hay consenso dentro del Ejecutivo. Actualmente, el presupuesto militar asciende a unos 13,5 billones de rublos, equivalentes a 147 mil millones de euros.

El jefe del Kremlin también comparó la situación rusa con la de Europa, donde los países integrantes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) acordaron elevar su gasto militar al 5 % del PIB en la próxima década. En contraste, Putin defendió que Rusia busca estabilizar su economía y no tiene planes agresivos hacia Occidente.

(APHA)