La Organización de las Naciones Unidas (ONU) y varios países latinoamericanos, entre ellos Cuba, Venezuela, Chile y Colombia, condenaron enérgicamente los recientes bombardeos de Estados Unidos contra instalaciones nucleares en Irán.
Calificaron la ofensiva como una peligrosa escalada que amenaza la estabilidad regional e internacional.
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su preocupación por el creciente conflicto y advirtió que la situación "podría salirse de control". Reiteró que “no existe una solución militar” y que solo el camino diplomático puede evitar una crisis mayor.
México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), reafirmó su compromiso con la paz y llamó a las partes a resolver sus diferencias mediante el diálogo. Además, informó que mantiene comunicación constante con los connacionales que residen en la región para garantizar su seguridad.
Organizaciones como Hamás y los hutíes también condenaron los ataques, responsabilizando tanto al gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, como a la administración del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por las posibles consecuencias humanitarias y geopolíticas que pueda traer esta ofensiva.
(CAGG)