La Organización de las Naciones Unidas (ONU) alertó sobre el riesgo de hambruna en Bolivia, señalando que la inseguridad alimentaria se ha deteriorado debido a la alta inflación y la escasez de combustible.
El informe de la agencia especializada en Alimentación y Agricultura y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) advierte que la crisis económica ha reducido la capacidad de importación y el poder adquisitivo de los hogares, afectando el acceso a los alimentos. En octubre de 2024, cerca de 2.2 millones de bolivianos estaban en inseguridad alimentaria aguda.
El Gobierno boliviano rechazó el informe, asegurando que el país mantiene una producción activa y seguridad alimentaria.
(CAGG)