La ley seca, que prohíbe la venta de alcohol durante periodos electorales, fue aprobada por los ciudadanos de Nuevo León. No obstante, también manifestaron que su implementación no genera grandes repercusiones.
Con motivo de las elecciones del Poder Judicial, esta medida entrará en vigor en el estado a partir del viernes 30 de mayo. La venta de bebidas alcohólicas quedará suspendida desde el primer minuto de ese día y hasta el lunes 2 de junio.
En un recorrido realizado por el equipo de GAMAVISIÓN NOTICIAS en el centro de Monterrey, la mayoría de los habitantes consultados manifestó estar de acuerdo con la medida a implementar.
Pese a ello, gran parte de los entrevistados consideraron que la aplicación de esta restricción no marca una diferencia significativa, ya que, según afirmaron, quienes deseen consumir bebidas alcohólicas o decidan no acudir a votar lo harán independientemente de la medida.
A los negocios que desobedezcan a la Ley seca y comercien de manera ordinaria con las bebidas alcohólicas se les aplicarán multas las cuales rondan entre los 10 mil hasta los 32 mil pesos.
(CAGG)