El asesino serial japonés Takahiro Shiraishi, de 34 años, fue ejecutado en un centro de detención de Tokio tras ser condenado a muerte por matar y desmembrar a nueve personas que conoció en redes sociales.
Por primera vez desde 2022, las autoridades del país isleño cumplieron una sentencia capital contra el hombre sentenciado por robo, violación, asesinato, destrucción y abandono de los cuerpos.
Shiraishi admitió haber contactado a las víctimas, de entre 15 y 26 años, por Twitter y ofrecerles ayuda para morir luego de que expresaron deseos suicidas.
(APHA)