En su primera audiencia en México, el exlíder del cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, se declaró inocente de presuntos cargos de narcotráfico imputados en su contra por la Fiscalía General de la República (FGR), e inició los procesos que tiene pendientes tras su extradición en 2007.

Informes señalaron que el detenido rindió su declaración preparatoria y rechazó los señalamientos formulados por el Ministerio Público Federal en la causa penal en su contra, por lo cual fue ingresado el lunes pasado al Centro Federal de Readaptación Social número 1, localizado en el Almoloya de Juárez, en el Estado de México.

Con esta diligencia, la autoridad mexicana reactivó la primera causa penal que hay en su contra, aunque aún tiene vigentes varios procesos legales y tres órdenes de aprehensión.

Por delitos tales como homicidio calificado, delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita, acopio, portación y posesión de armas de fuego y cartuchos de uso exclusivo del Ejército, el fundador del grupo delictivo de Los Zetas podría enfrentar hasta 730 años de prisión.

Como se recordará, Cárdenas Guillen, de 57 años fue uno de los capos más buscados, extraditado a Estados Unidos en 2007, donde recibió una condena de 25 años de cárcel, cuya pena fue disminuida, siendo deportado a nuestro país.

(APHA)