Una plataforma marítima estadounidense, conocida como L/B Jill y propiedad de Seacor Marine, ha sido detectada operando en aguas territoriales mexicanas, cerca de Playa Bagdad, a unos 17 kilómetros de la costa. La estructura fue enviada desde Nueva Orleans para recuperar fragmentos del propulsor del megacohete Starship de SpaceX, que explotó en su última prueba de lanzamiento en Brownsville, Texas. Sin embargo, hasta el momento no se ha confirmado si cuenta con los permisos necesarios para realizar estas actividades en la zona, lo que ha generado preocupación entre las autoridades y las comunidades locales.

La presencia de la plataforma ha encendido las alarmas de organizaciones civiles y pescadores, quienes denuncian que los constantes lanzamientos de SpaceX están afectando gravemente a la fauna marina, especialmente a las tortugas, y reduciendo las zonas de pesca, lo que impacta negativamente los ingresos de los trabajadores del mar.  

(CAGG)