Cerca de 240 armas, 622 cargadores y más de 20 mil cartuchos, decomisados durante distintos operativos de seguridad, fueron destruidos en las instalaciones de la Séptima Zona Militar, en Apodaca, Nuevo León.
Con la presencia de autoridades de los tres niveles de gobierno —federal, estatal y municipal— se llevó a cabo una demostración del proceso de destrucción y eliminación total del armamento.
Durante la ceremonia, personal de la Secretaría de la Defensa Nacional explicó paso a paso el procedimiento de destrucción, el cual garantiza una mecánica rigurosa que va desde el registro de los números de serie hasta el corte físico de las armas y su desecho final.
Todo el material aniquilado quedó asegurado durante diversas acciones conjuntas de seguridad realizadas en 2025 en el estado de Nuevo León, donde se destacó la coordinación entre la Guardia Nacional, Fuerza Civil y corporaciones policiales municipales.
(CAGG)