China presentó un microdron del tamaño de un mosquito, diseñado para misiones de espionaje encubiertas. Desarrollado por la Universidad Nacional de Tecnología de la Defensa, puede infiltrarse sin ser detectado y transmitir datos en tiempo real.
El avance forma parte de la estrategia china de “guerra inteligente”, que incluye drones miniatura con inteligencia artificial, controlados desde un teléfono móvil.
Si se produce en masa, este dispositivo podría revolucionar la vigilancia militar y superar una nueva era, de forma invisible, cercana y difícil de detectar, los modelos superan al de otros países como Estados Unidos o Francia.
(APHA)