El arribo de cientos de peces muertos sorprendió el lunes a habitantes y turistas en el puerto de Chuburná, en Progreso, Yucatán, fenómeno que desde hace una semana afecta también a Chelem, donde primero fue reportado.
Autoridades atribuyeron el hecho a un florecimiento de algas tóxicas, dañinas para peces y para la piel humana, aunque no confirmaron que se trate de marea roja. El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav) indicó que sí podría clasificarse así, pero continúan los estudios.
El alcalde de Progreso, Erik Rihani, pidió evitar nadar en zonas afectadas y no consumir las especies halladas, por riesgo de infecciones estomacales. Prestadores de servicios en la zona turística suspendieron paseos y visitas hasta nuevo aviso.
(APHA)