Organizaciones ambientalistas lograron que se prohibiera la extracción de combustibles fósiles en casi la mitad de la Reserva Nacional de Petróleo en Alaska, así como la conservación de una zona que alberga especies de animales protegidas, incluidos osos polares y renos.

Apenas en marzo del año pasado el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aprobó el proyecto Willow, propiedad de Conoco Phillips, controvertida empresa de perforación petrolera en el Ártico.

Lo anterior provocó una reacción negativa entre activistas, grupos ambientalistas y climáticos.

A casi un año de ello, el gobierno de Biden puso fin a la norma de la extracción de petróleo, esta acción podría mejorar la aprobación entre los votantes jóvenes en las próximas elecciones, a pesar de la inconformidad de los nativos quienes quedarían sin empleo.

(H.R.)